BERENJENAS EN ESCABECHE

LA RECETA DE LA ABUELA KIKA

Abuela Kika, Vivi y Marta Elena

Una de mis pasiones gastronómicas pasa por esta receta como acompañamiento para carnes de cualquier tipo, para darles un toquecito especial a las ensaladas, para comerlas simplemente con pan.

Cada vez que visito a mi tía Marta, la hermana de mi papá, me deleito con la receta que heredara de su madre, la abuela Kika. Y como Marta sabe que deliro por ella, no falta jamás en la mesa que compartimos. Ésto es algo que se agradece y mucho. Recuperar los sabores de la infancia, de los veranos en Longchamps con la abuela cocinando para sus nietos, es algo que no se puede comprar con nada.

Sé positivamente que a mi hija Lucía no le gustan ni las berenjenas ni el vinagre, pero esta receta no se puede perder. Quizás con el tiempo pueda reconciliarse con esos sabores. Quizás le complazca prepararlos para agasajar a los otros. Son apuestas fuertes que le estoy poniendo a mi pequeñita.

Sé que Ezequiel es un sibarita que sabe apreciar la buena mesa y que tiene una compañera dispuesta a poner las manos en la masa sin miedo a experimentar.

Es por todo ello que esta receta viene en este recetario.

 

Ingredientes

·       1 kilo de berenjenas

·       sal gruesa, cantidad necesaria

·       vinagre de manzana (puede reemplazarse por vinagre de vino)

·       agua, cantidad necesaria

·       condimento para pizza o en reemplazo: orégano, perejil, ají molido

·       ajo (opcional)

·       aceite, preferentemente de oliva

Procedimiento

1.   Cortar las berenjenas en rebanadas del grosor que se prefiera. El corte puede ser longitudinal u horizontal, de acuerdo al gusto del consumidor.

2.   Colocar las mismas por tandas sobre un colador, rociándoles sal gruesa por encima. Este proceso conseguirá que la berenjena elimine el amargor natural que posee. Dejarlas exudando 2 horas como mínimo.

3.   Poner una cacerola mediana al fuego fuerte para conseguir el hervor, con mitad de agua y mitad de vinagre. Enjuagar las berenjenas e ir hirviéndolas hasta lograr que queden tiernas. Colarlas y dejar que se enfríen totalmente mientras se escurren en el colador.

4.   En un recipiente pequeño mezclar las especias con un poquito de aceite. En mi versión de la receta no agrego ajo porque me parece que quedan demasiado fuertes para mi paladar, por eso este ingrediente es opcional en el listado.

5.   A continuación, en frascos limpios, ir poniendo, primero, una capa de aceite en el fondo, luego una de berenjenas y por sobre ellas, parte del condimento mezclado. Cubrir luego con aceite y repetir el procedimiento hasta completar cada frasco. Antes de cerrarlos herméticamente, cubrirlos con aceite.

Advertencia: Dado que la cocción no se realiza sólo con vinagre, no debe guardarse la preparación por más de 15 ó 20 días. Las berenjenas nos brindan su delicioso sabor pero tienen la desgracia de pervertirse por efectos del botulismo, bacteria más que mortal para nosotros. Así que, mi recomendación es prepararlas y engullirlas con entusiasmo durante dos semanitas. Como son ideales para disolver grasas por el vinagre, no hay como un asado con achuras acompañado con ellas. Berp!